Finder Argentina se presenta a través de sus productos e instalaciones, con la tecnología en primer plano. Hoy está muy focalizada en domótica. Objetivos, trayectoria y proyectos, en las próximas líneas.

Internet de las Cosas (IoT, por Internet of Things) es un concepto que se refiere a la interconexión digital de objetos cotidianos con la red. Se calcula que cualquiera de nosotros está rodeado, al menos, por entre 1.000 y 5.000 objetos. Según la consultora Gartner, este año habrá en el mundo aproximadamente 26.000 millones de dispositivos con un sistema de conexión. Otra consultora, Abi Research, afirma que para la fecha existirán 30.000 millones de dispositivos inalámbricos conectados, involucrando sistemas y servicios que van más allá del tradicional M2M (máquina a máquina), con una amplia variedad de protocolos, dominios y aplicaciones. El producto estrella de Finder Argentina tiene que ver con eso. “Yesly es un sistema de automatización que permite controlar luces, toldos y persianas eléctricas, entre otros productos, en modo inteligente y garantizando el máximo confort”, introduce y detalla Alejandro Ploder, gerente comercial de la compañía, quien subraya que la instalación no requiere reformas invasivas y destaca que es escalable, ya que se puede aplicar en una sola estancia o en toda la casa, según las necesidades de cada cliente. ¿Cómo funciona? “El sistema consta de varios dispositivos que se comunican a través de bluetooth –y también wif–, y que se pueden elegir de acuerdo con la vivienda. El sistema es versátil, económico, cómodo, fácil de instalar y de usar”, precisa el entrevistado al explicar que el lanzamiento se produjo en el marco de un concepto clave para la empresa: tu casa smart. “El eslogan de Yesly es Time For Confort Living”, puntualiza. En la empresa eligen demostrar con casos concretos en qué consiste Yesly. “En la sede de la Universidad Tecnológica Nacional de la avenida Medrano, en CABA, instalamos en el quinto piso un sistema que permite encender luces y los ventiladores de techo, a través de un detector de presencia. Comenzó como un proyecto experimental y después las autoridades decidieron extenderlo a otros pisos, habida cuenta del ahorro energético que significaba, en el orden del 50%, además de la comodidad”, desarrolla el ejecutivo. Pero también hay otros ejemplos.

En Al Río, proyecto que cuenta con la certificación ambiental Leed, comparte Ploder, hicieron un desarrollo con Ericsson, donde instalaron sus sensores de presencia y movimiento. “Y hace tres años hicimos un proyecto en Google y también en tres edificios de la compañía de seguros La Segunda”, enumera el entrevistado, que hace hincapié en el alto nivel de automatismo que permite el sistema. “Tener eficiencia no significa perder confort”, continúa el gerente, quien menciona también una estación de servicio de Axion Spot donde los productos de la empresa lograron que se automatizara casi todo, para ser manejado desde una tablet. Por ejemplo, indica el ejecutivo, así se logra tener la cantidad de luz artificial justa, evitando todo derroche. Consultado por los costos, en Finder hacen referencia a “invertir” en automatismo. Así y todo, señalan los réditos: mientras que algunos cálculos hablan de un costo que puede equivaler del 1,5% del 3% al total de una construcción, una vivienda automatizada se cotiza, según la empresa, entre un 10% y un 15% por arriba del precio del mercado, según el grado de automatización. Además, a través de la herramienta se logra un ahorro energético que oscila entre un 10% y un 30% del consumo, siempre en relación con la dinámica. Además de sus sistemas de automatización, la empresa clasifica su oferta en dos líneas: las soluciones industriales y los productos destinados a Civil, Residencial & IOT. Entre las primeras ubica a sus relés industriales, de potencia, de estado sólido (SSR) y de seguridad; sus relés de supervisión y control; sus contadores de energía; sus protectores de sobretensiones (SPD); temporizadores; climatización de tableros eléctricos y fuentes de alimentación conmutadas. En el segundo grupo incluye a sus interruptores Horario y Crepusculares; telerruptores, dimmers y automáticos de escalera; contactores modulares, termostatos y cronotermostatos, además de las ya citadas Soluciones IOT (Yesly).

Hay equipo

“Afortunadamente, contábamos con la infraestructura informática para que todos los colaboradores de Finder Argentina trabajen en modalidad home office”, comentan en la gerencia comercial de la empresa cuando el tema es su desenvolvimiento en este 2020, y destacan, no obstante, que debieron cerrar durante dos semanas hasta poder conseguir el permiso para operar. “Aprovechamos ese tiempo para adecuarnos a la situación”, aseguran. Debido a los mercados que atienden –alimenticio, limpieza, sanitario, energía, comunicaciones–, la provisión de sus productos fue considerada una actividad esencial, por lo que, transcurrida la primera quincena de cuarentena dura, reabrieron sus oficinas (con personal mínimo y los cuidados sanitarios correspondientes), logrando reactivar su red logística y mantener el servicio para sus clientes. En la actualidad, el 75% del personal (incluido el equipo comercial) sigue operando con la modalidad home office. “La mayoría de las actividades comerciales presenciales se han vuelto digitales; y logramos incrementar nuestra presencia en ellas”, dice Ploder, en una charla realizada a través de la plataforma digital de la empresa. “En estos meses realizamos 100 webinars; y vamos a participar en congresos y ferias digitales, manteniendo e incluso incrementando nuestra presencia en el mercado argentino”, responde, interrogado por el aquí y ahora de la compañía. “Nuestro mercado local se vio sumamente afectado por la baja del poder adquisitivo, consumos postergados y el cierre de industrias y comercios”, apunta en referencia a la plaza, y remarca que, pese a ese escenario, “hemos realizado grandes esfuerzos para reactivar nuestros objetivos comerciales, logrando incrementar nuestras ventas a escalas impensadas, teniendo en cuenta el contexto”. Los resultados son el fruto del trabajo del equipo de Finder Argentina, formado por 16 personas que estructuralmente se dividen en dos sectores: el administrativo-financiero, que cuenta con una gerencia y dos colaboradores, y el área comercial, que tiene otra gerencia y abarca lo referente a Marketing, Ventas, Comercio Exterior y Logística. “Puntualmente, nuestro equipo de Ventas está formado por tres vendedores externos en Buenos Aires, más uno por cada región del país: Noroeste, Cuyo, Córdoba y Patagonia. “En el corto plazo, estaremos incorporando un vendedor para la región del litoral”, anticipa Ploder, quien agrega que el staff también incluye un analista de ventas interno. “Todo nuestro equipo comercial está compuesto por asesores (técnicos o ingenieros) que van a poder dar el soporte necesario sobre nuestros productos”, sostiene. “En Finder priorizamos la venta a través de distribución, por lo que el mayor volumen se viabiliza a través del canal”, revela, confiando que cuentan con más de 60 distribuidores y revendedores. “No obstante, también tenemos clientes estratégicos, integradores en su mayoría”, continúa, y señala que es a través de ellos que realizan la provisión de materiales para grandes obras de infraestructura en mercados de Energía (Generación, Distribución y Transmisión), Ferroviario y Oil & Gas, manteniendo en total a unos 200 clientes activos. A escala global, la firma cuenta con 26 filiales y distribución en 80 paises. En la región, primero llegó a Brasil en 1998 y, diez años más tarde, se estableció en la Argentina. En ese entonces, ubicó sus oficinas en la Ciudad de Buenos Aires, más exactamente en Puerto Madero. Esa primera sede estaba operada por un grupo mínimo de personal y durante seis meses, enfatizan, se comenzó a generar un canal de distribución, con una política clara y un stock mínimo en ese momento del país. Tres años más tarde, “por la necesidad de mantener el nivel de servicio hacia nuestros clientes”, Finder Argentina mudó sus oficinas a San Isidro, en la provincia de Buenos Aires, con instalaciones siete veces más grandes que las anteriores (más de 400 m² distribuidos en tres pisos, donde destinan una cuarta parte a su stock). De acuerdo con datos de la empresa, su facturación local ronda entre las 130.000 y las 150.000 piezas anuales, y en este complicado 2020 están cumpliendo un 80% de este objetivo.